La gran actualización de la cadena de bloques de Ethereum logró ponerse en marcha el 15 de septiembre, pasando a un sistema de «prueba de participación» (PoS) de menor consumo energético casi sin contratiempos.

Sin embargo, la anticipación del evento hizo que el éter subiera un 85% desde su estancamiento en junio, que a partir de ahí ha hundido un 19%, perjudicando junto con el bitcóin y otros activos de riesgo por la angustia de los inversores sobre la inflación y la política monetaria de los bancos centrales.

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No obstante, varios agentes del mercado son optimistas sobre las perspectivas a largo plazo de Ethereum y su criptodivisa nativa.

«Anteriormente, hemos hablado con los fondos soberanos y los bancos centrales para ayudar a construir sus asignaciones de activos digitales (…) pero la inversión directa ha sido rechazada debido a la preocupación por la energía», afirmó Markus Thielen, director de inversiones de la gestora de activos IDEG Limited.

«Con el paso de Ethereum a PoS, esto resuelve claramente este último pilar de preocupación».

Ciertos criptoinversores están en estos momentos centrando su atención en el próximo evento que podría sacudir los precios.

La próxima actualización significativa para Ethereum es el «Shanghái«, que los participantes en el mercado esperan para dentro de unos seis meses, y que tiene como objetivo reducir sus altos costos de transacción.

Permitiría a los validadores, que han depositado tokens de éter en la cadena de bloques a cambio de un rendimiento, retirar sus monedas apostadas, para mantenerlas o venderlas.

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Más de 20.000 millones de dólares de depósitos de éter están actualmente bloqueados, señala el proveedor de datos Glassnode.

La criptomoneda éter apostada -considerada como una apuesta por el éxito de Ethereum a largo plazo, ya que no se puede canjear hasta que ocurra lo de Shanghái- cotiza casi a la par con el éter, a 0,989 unidades, según datos de CoinMarketCap, lo que indica confianza en futuras subidas.

La moneda había bajado hasta 0,92 en junio.

«PURGE» Y «SPLURGE»

Luego de Shanghái, se prevé una serie de otras actualizaciones para Ethereum, que el cofundador Vitalik Buterin ha apodado «surge», «verge», «purge» y «splurge».

Es posible que el enfoque principal de las futuras actualizaciones sea la capacidad de la cadena de bloques para procesar más transacciones.

De acuerdo con Alex Thorn, jefe de investigación a nivel de empresa en el banco centrado en cadena de bloques Galaxy Digital, declaró: «Debido a que Merge se retrasó durante varios años, los inversores, los operadores y los usuarios finales tienen una gran cantidad de inquietud en torno a cuándo Ethereum escalará significativamente».

Asimismo, Paul Brody, líder global de cadena de bloques en EY, dijo: «El futuro de Ethereum tiene que escalar, y lo hará, a cientos de millones de transacciones al día».

«ASESINOS DE ETHEREUM»

El objetivo primordial de Merge era reducir el uso de energía de Ethereum, ya que las criptodivisas están siendo criticadas por su enorme huella de carbono.

Los desarrolladores declaran que el consumo de energía de la cadena de bloques se redujo en un 99,95%, lo que podría tentar a los poderosos inversores institucionales, antes limitados por las preocupaciones ambientales, sociales y de gobierno (ESG).

Merge y las futuras actualizaciones, por su parte, reducen el atractivo inversor de las denominadas cadenas de bloques «asesinas de Ethereum«, como Solana y Polkadot, según Adam Struck, director general de la empresa de capital riesgo Struck Crypto. Pero, los inversores institucionales no están entrando todavía, ya que un temible entorno macro enfría el apetito por los activos de riesgo.

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A largo plazo, se estima que el cambio a PoS disminuya la tasa de emisión de tokens de éter – potencialmente hasta un 90% – lo que debería hacer subir los precios.

También los rendimientos anuales del 4,1% por apostar tokens de éter para validar transacciones podrían resultar tentadores para los inversores.

No obstante, aunque el método prueba de participación permite estos lucrativos rendimientos, muchos puristas de las criptomonedas señalan que aleja a Ethereum de un modelo puramente descentralizado, ya que los mayores validadores podrían ejercer una mayor influencia sobre la cadena de bloques.

«Puede haber volatilidad en los próximos días«, dicen los analistas de Kaiko Research. «Pero por ahora la comunidad puede darse una merecida vuelta de campana».