España tiene la capacidad de convertirse en un centro de distribución de gas para Europa que ayude a apoyar los esfuerzos regionales para frenar la dependencia del gas ruso, dijo el miércoles el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, en una conferencia de prensa con su homólogo polaco.
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«España está preparada para aumentar sus medidas de solidaridad», dijo Sánchez, que añadió que el 20% de su gas natural licuado (GNL) importado fue reexportado a otros países de la UE en junio.
La guerra en Ucrania ha puesto en cuestión la dependencia energética de Europa respecto a Rusia. Moscú ha reducido el suministro de gas al continente, achacando la interrupción a las sanciones impuestas en represalia por la guerra y a los retrasos en la devolución de una turbina reparada.
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Sánchez dijo que España haría lo posible para evitar que Europa se convierta en un «rehén energético» del presidente ruso, Vladimir Putin.
Esta semana, los ministros de Energía acordaron en Bruselas que todos los países de la UE deberían reducir voluntariamente el uso de gas en un 15% en un intento de ahorrar suministros para el invierno.
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Aquellos con capacidad limitada para exportar gas a los vecinos de la UE pueden solicitar un objetivo menor, y un borrador del documento al que tuvo acceso Reuters mostraba que países como España podrían ofrecer una reducción del 7% en su lugar si pueden demostrar que han enviado la mayor parte del gas que pueden a los vecinos de la UE.
Sánchez dijo que su Gobierno estaba trabajando con el sector privado y el Congreso español en un plan de contingencia de ahorro energético para cumplir el nuevo objetivo.
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