Los efecto de esta investigación, realizada en 16 mercados, ponen de relieve que las generaciones más jóvenes tienden a identificarse más con este género (no binario), debido a que la media es bastante inferior para la población en general, siendo solo un 4% de los españoles los que prefieren denominarse de esa manera y un 3% en los demás mercados estudiados. En este sentido, Alemania y Austria encabezan el listado de países con un mayor porcentaje de población que se identifica como no binaria, con un 5% en ambos mercados.

La admisión de este género es buena y más de la mitad de la población encuestada en España (un 53%) declara que entiende que haya personas que prefieran no identificarse como hombre o mujer. De igual modo, cuatro de cada diez españoles (44%) comprenden que algunas personas no quieren que se dirijan a ellos como hombre o mujer, un resultado cinco puntos porcentuales más bajo que la media global (49%). Gran parte de la población convive con personas no binarias: un 41% de los encuestados a escala global dicen conocer al menos a una persona no binaria.

El sector empresarial juega un papel determinante en la inclusión

La inclusión social de las personas no binarias es un factor fundamental en entornos de trabajo y es que cuatro de cada diez españoles (42%) afirman que prefiere trabajar en una empresa que acepte y reconozca a las personas no binarias. No obstante, el rol de las compañías para fomentar la diversidad y la inclusión va más allá de políticas internas, debido a que igualmente repercute a sus negocios; es decir, tres de cada diez personas en España (28%) dicen que prefieren comprar productos y servicios de empresa que tengan en cuenta a las personas no binarias.

También, a escala global, un 66% de la población declara que no le molesta que las compañías cada vez utilicen más los pronombres no binarios en sus comunicaciones y un 57% dice que le parece imprescindible que su empresa se dirija a ellos de una forma que respete su identidad. Del mismo modo, un 37% señala que le parece innecesario que una empresa le pregunte por su género.

Género y documentos oficiales de identificación

El estudio, además, analiza si las personas no binarias se han sentido discriminadas, acosadas o atacadas: el 74% de los encuestados en todo el mundo afirman que lo han sido y un 63% dice que se siente inseguro al salir de casa, mientras que un 51% afirma que no se siente del todo acogido en su casa. Por otro lado, el estudio arroja que un 44% de las personas de este colectivo suele sentirse deprimido y un 59% constata no sentirse seguro al realizar compras.

En lo que respecta a los documentos de identificación o las tarjetas bancarias solo un 13% de la población española prefiere que su género no aparezca, una cifra muy similar a la media global (12%). Sin embargo, es un porcentaje casi tres veces mayor en el colectivo no binario, dado que un 34% de la población no binaria global prefiere que su género no se detalle en sus documentos oficiales.

Adicionalmente, el estudio desprende que son más las personas no binarias que saben que pueden cambiar su nombre en sus tarjetas bancarias que la población general: el 55% de las personas no binarias están al tanto de que pueden pedir este cambio, mientras que solo el 23% que no pertenecen al colectivo comparte este conocimiento.

Especialmente la aceptación fue el eje vertebrador de la creación de True Name, una funcionalidad de las tarjetas Mastercard que permite a las personas poner el nombre con el que se identifican en ésta. Esta funcionalidad, que se lanzó en Estados Unidos en 2019, llegó a Europa en 2020 y busca ayudar a las personas no binarias y del colectivo LGBTQI+ a evitar sufrir experiencias negativas a la hora de efectuar pagos.