De acuerdo con un estudio hecho por la consultora Economist Impact a nivel mundial, está enfocado en el miedo y preferencias por bitcoin (BTC), criptomonedas y otras monedas digitales, asimismo, los criptoactivos se han convertido en una forma más común de pago digital.

En base a esto, la investigación apunta que bitcoin y las criptomonedas son las preferidas por 13% de los encuestados para realizar pagos, seguida de las monedas digitales emitidas por empresas tecnológicas y financieras (12%) y una moneda digital emitida por el gobierno (9%).

De esta manera, todos los encuestados habían realizado un pago por un producto o servicio durante los últimos 12 meses utilizando algún tipo de pago digital. La mitad de ellos en países desarrollados y la otra mitad en países en vía de desarrollo.

«Es un paso social hacia la digitalización de todo. Habrá nuevas formas de realizar transacciones de las que no estamos hablando hoy, y esa evolución en los pagos y las finanzas continuará», declaró John Mitchell, director ejecutivo y cofundador de Episode Six, una compañía de pagos que participó en el estudio.

La finalidad de esta consulta fue explorar «hasta qué punto los consumidores confían en los pagos digitales» y además, qué obstáculos pueden existir para que predominen las funciones monetarias electrónicas o digitales, señala el informe presentado por Economist Impact.

La encuesta se realizó en países como Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Corea del Sur, Australia, Singapur Brasil, Turquía, Vietnam, Sudáfrica y Filipinas. Se entrevistaron a 3.000 personas entre usuarios e inversionistas entre enero y febrero de este año. Aproximadamente la mitad (53%) eran hombres y el resto mujeres (47%).

Barreras para mayor adopción de bitcoin

Tal como se mencionó antes, la encuesta también quiso conocer cuáles se consideran como las principales barreras que impiden una mayor adopción de bitcoin y criptomonedas.

La principal causa que evita la adopción –según los encuestados– es la necesidad de «una forma de identificación personal digital, que aún no existe» con un 24%, esta inquietud creció en comparación con el 2021, es ese año el 13% consideraba ese aspecto un obstáculo.

Asimismo, la falta de conocimiento o educación sobre los activos digitales bajó a un 22%, cuando en 2021 llegaba a 51%.

¿Se acerca el fin del efectivo?

Otro tema sobre el que fueron consultados los consumidores en varios continentes, fue sobre el futuro del efectivo.

El 47% de los encuestados considera que su país dejará de tener efectivo entre los próximos 3 o 5 años. El 18% dijo que el país en el que viven dejará de tener efectivo (definido como el uso predominante de métodos de pago digitales en lugar de físicos) en el próximo año o dos.

Por ende, solo 13% cree que su país nunca se quedará sin efectivo, representando un descenso en comparación al 2020, cuando el 28% tenía el mismo punto de vista.

«Es necesario avanzar hacia una sociedad sin efectivo y creo que vimos algo de eso durante el punto álgido de la pandemia. La conveniencia, la velocidad de las transacciones, la inclusión y la eficiencia son razones para esto», dijo Mitchell.

Para los ejecutivos el uso de bitcoin es entorpecido por las regulaciones

El estudio de Economist Impact no solo se basó en las personas que usan las criptomonedas, también consultó a empresarios de varios países.

Por ejemplo, cuatro de cada diez o un 41% de los encuestados cree que la adopción de bitcoin y criptomonedas destinadas a inversiones institucionales o tesorería corporativa se ve entorpecida por las regulaciones.

«Por el contrario, la confianza del mercado o la comprensión de los activos digitales ahora se considera un obstáculo por solo el 35% de las instituciones, frente al 47% hace un año», resalta el informe.

Por su parte, Tobías Adrián, consejero financiero y miembro de la directiva del Fondo Monetario Internacional, el sector privado es «muy importante en términos de innovación en torno al dinero digital y no creo que el banco central deba estar en el negocio de definir necesariamente la frontera tecnológica de los sistemas de pago».

Bajo esta línea, Adrián opina que la regulación no puede ir en contra de la innovación o eliminarla, aunque considera que la innovación «solo puede tener toda la confianza si está bien regulada».

Bitcoin y las criptomonedas son una necesidad para las empresas

El estudio muestra que el 85% de los inversionistas consultados están de acuerdo en que existe la necesidad de monedas digitales como bitcoin, como diversificador en una cartera o cuenta de tesorería.

De hecho, un 87% de los encuestados está de acuerdo en la necesidad de establecer una institución internacional para regular las monedas digitales, así como el Banco de Pagos Internacionales.

«Los encuestados están divididos sobre si bitcoin y otras criptomonedas deben considerarse estrictamente como una moneda para liquidar transacciones o como un activo para almacenar/apreciar valor», apuntó el informe.

Es por ello que, la encuesta arrojó que el 41% las ve como una moneda normal (un aumento del 34% en comparación al 2021). Asimismo, un 30% las ve como una combinación de moneda digital con activo de valor.

Por parte al uso especulativo, un 23% las ve como activos para la especulación. En este caso, «sigue estando entre las opciones menos seleccionadas, lo que indica una madurez continua en el mercado», dice el reporte.

Las revelaciones de la encuesta de Economist Impact en el área empresarial, han sido reforzadas por un estudio reportado por el portal web de CriptoNoticias. Donde se demostró que un 58% de las compañías multinacionales ya utiliza las criptomonedas para enviar pagos al exterior.

En este caso lo que indica es que 6 de cada 10 empresas las usan para este tipo de pagos. Bitcoin es la más escogida —sobre todo entre aquellas con mayores ganancias anuales—, sin embargo, también aparecen las criptomonedas estables o stablecoins entre las favoritas.