La mayor cooperativa agrícola de Brasil entró en 2024 con unas existencias de grano superiores en más de un 50% a las del año pasado, debido a la abundante cosecha de la campaña anterior y a la lentitud de las ventas de los agricultores, dijo el presidente de Coamo, Airton Galinari.

La situación refuerza que la presión de la oferta podría seguir pesando sobre los precios de los cereales y mermar la confianza de los agricultores en Brasil, el mayor exportador y productor de soja del mundo y uno de los principales exportadores de maíz.

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Coamo informó existencias de 3,66 millones de toneladas métricas entre soja, maíz y trigo. El volumen representa más del 36% del total de casi 10 millones de toneladas recibidas por la cooperativa el año pasado.

Los futuros del trigo de Chicago tocaron el viernes mínimos de dos meses y medio, mientras que el maíz y la soja se consolidaron cerca de mínimos de tres años, tras las previsiones oficiales de un aumento de las existencias de grano en Estados Unidos.

Además de tener los silos llenos de la cosecha anterior, Coamo está lidiando con entregas anticipadas de soja de la cosecha de 2024, presionando su propia capacidad de almacenamiento, actualmente en 6 millones de toneladas.

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Coamo ha recibido más del 30% del total de soja que esperaba de la cosecha actual, que es temprana, según Galinari.

Pero los granos siguen llegando

Los agricultores pueden entregar granos a la cooperativa sin concretar una venta durante un año. Pero como los precios son bajos, los agricultores sólo han concretado ventas por menos del 10% de su soja nueva, mientras que en años anteriores los tratos cerrados representan entre el 30% y el 40% de la soja nueva en esta época, señaló Galinari.

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Desde la perspectiva de los agricultores brasileños, la situación puede empeorar antes de mejorar. Después de que una sequía destruyera los campos de soja en Argentina, el país cosechará el doble de habas que en la última campaña, reponiendo las existencias mundiales.

Mientras tanto, en Brasil, los agricultores pueden verse obligados a vender grano para pagar las facturas que vencen en abril y mayo, lo que generaría aún más presión a la baja sobre los precios, según el ejecutivo de Coamo.

Fuente: Reuters.