China llevó a cabo el cierre temporal de la actividad portuaria de Ningbo-Zhoushan, terminal clave de la ciudad de Meishan, debido a la detección de un caso de Covid-19 dentro de sus intalaciones.
El país asiático tiene una actitud de “tolerancia cero” ante el virus, por lo que las medidas de limitar el número de personas y de cargos entrantes en las zonas de este importante puerto, es apoyada por las autoridades.
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Esta sería la segunda vez en 2021 que China suspende las operaciones en uno de sus puertos clave.
De acuerdo a la información de Reuters, 40 barcos contenedores estaban en modo este jueves en la terminal. “Con los buques siendo redirigidos, los puertos en Shanghai están afrontando un empeoramiento de la congestión, lo que amenaza con elevar las tasas de envíos contenedores, que recientemente alcanzaron récords históricos de 20.000 dólares por cada contenedor de 40 pies”, destaca la agencia de noticias.
Asimismo, desde Bloomberg señalaron que este y otros bloqueos como la actividad de tifones en Yantian, el mes pasado, generan más tensión a las cadenas globales de suministro, prolongando las presiones de costes de los inputs y arriesgando que la escasez de inventarios alcance la temporada de compras navideñas.
En tanto, la agencia informó que el puerto de Los Ángeles, en Estados Unidos apunta a otra caída de sus volúmenes por el confinamiento reportado en Ningbo.
De esta forma, los expertos aseguran que este tipo de conductas de China puede poner en jaque el comercio mundial, debido a los constantes cortes en las cadenas de suministro.
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Con información de Investing.com
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