La fábrica francesa de relojes y joyas Cartier y otras marcas del grupo Richemont se retiraron del Consejo de Joyería Responsable (RJC) luego de que el organismo de la industria no cortará sus lazos con Rusia, afirmaron ejecutivos del grupo a periodistas el miércoles en la feria de la industria relojera Watches and Wonders.

«No forma parte de los valores de Richemont formar parte de una organización en la que algunos miembros apoyan conflictos y guerras«, señaló Cyrille Vigneron, presidente y director general de Cartier.

De la misma manera, el fabricante de joyas Pandora igualmente afirmó el miércoles que cortaba sus lazos con el RJC, que establece normas éticas para la industria de la joyería y la relojería.

La pertenencia de la empresa estatal rusa Alrosa al RJC ha originado un gran interés, aunque se retiró de forma voluntaria del consejo del RJC a principios de este mes.

El productor ruso de diamantes (el mayor del mundo) fue comprendido en una lista de sanciones de Reino Unido la semana pasada y Estados Unidos ha puesto el ojo tanto a la compañía como a su director general, Sergei Ivanov, quien, conforme con el Tesoro estadounidense, es uno de los aliados más cercanos del presidente Vladimir Putin.

El presidente del RJC, David A. Bouffard, se pronunció en una declaración enviada por correo electrónico al portal Reuters el miércoles, donde afirmó que una evaluación legal de terceros sobre el estatus de miembro de Alrosa, iniciada al comienzo de la guerra, concluirá en un plazo «inminente«, destacando que la organización «reconoce que el ritmo de este proceso puede ser frustrante«.

«No estamos tratando de hacer una declaración en sí misma, estamos tratando de mantener los altísimos estándares que hemos ido configurando en los últimos 15 años. Si el RJC no puede mantener los estándares más altos, entonces no podemos formar parte de ello. Por eso nos retiramos«, declaró el director financiero de Richemont, Burkhart Grund.

De esta manera, agregó que el grupo de lujo estudiará cómo certificar sus etiquetas para tranquilizar a los consumidores.

Richemont, que suspendió sus actividades en Rusia, incluido el comercio electrónico, igualmente dijo que dejó de abastecerse de diamantes en el país desde el 24 de febrero.