El índice S&P Merval de las acciones líderes de la Bolsa de Buenos Aires cerró 2022 con un desempeño sobresaliente, pese a la elevada inflación y otros desequilibrios macroeconómicos que persisten en Argentina, las tensiones políticas en el país y una crisis global que ha golpeado a muchos mercados en el mundo.

El indicador acumuló en el año un alza del 142 %, superando con creces las ganancias medidas en moneda local logradas el año pasado, del 63 %.

«En contrapartida con lo que sucedió en la mayoría de las bolsas del mundo y a pesar de la incertidumbre política y económica, las acciones de las empresas del país operaron con fuertes alzas durante este año», afirmó al portal EFE, Maximiliano Donzelli, jefe de Research de la firma IOL Invertironline.

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Asimismo, el S&P Merval logró acumular en 2022 un rendimiento considerablemente superior a la subida del dólar financiero MEP, que fue de un 65,7 %, y le ganó a la elevadísima inflación de Argentina, que cerrará el año con un alza cercana al 95 %.

De hecho, midiendo el rendimiento del panel líder en dólares estadounidenses al tipo de cambio financiero MEP, el S&P Merval logró en 2022 un alza acumulada del 45,9 %, un rendimiento no visto este año en otras plazas bursátiles del mundo.

«El rendimiento del mercado argentino fue muy positivo, tanto respecto a los principales mercados del mundo como frente a la misma inflación argentina«, indicó a EFE Ariel Mamani, director ejecutivo de la firma Inverarg.

A PURA ENERGÍA

El S&P Merval, que concluye 2022 en niveles históricos (con un récord de 202.560,20 unidades el pasado miércoles), empezó a crecer con fuerza entrado ya el segundo semestre, sin embargo, se disparó en las últimas semanas, de la mano de un clima más favorable para activos de mercados emergentes y de apuestas tácticas en el armado de carteras de cara a 2023 que buscan aprovechar los convenientes precios de los papeles argentinos.

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Más de la mitad de las acciones líderes de Argentina ofrecieron este año rendimientos superiores a la inflación doméstica. Pero hubo un lote que realmente descolló: el de las empresas del sector energético, apalancadas por el alza mundial de los precios de los combustibles a partir de la guerra en Ucrania y por otros factores domésticos, como la subida de las tarifas de gas y electricidad,y los incentivos a la producción de hidrocarburos.

Las mayores ganancias acumuladas en 2022 fueron para las operadoras de gasoductos Transportadora de Gas del Sur (333 %) y Transportadora de Gas del Norte (280 %), la petrolera YPF (291 %) y las eléctricas Transener (239 %), Pampa Energía (166 %), Edenor (165 %) y Central Puerto (221 %).

En especial, Mamani destacó a YPF y Transportadora de Gas del Sur, que «presentaron balances mejores de lo normal y anunciaron proyectos a futuro que hacen que el público inversor dirija el foco hacia estas empresas».

A contramano fueron los bancos, muy expuestos al sector público y que tuvieron en general un pobre desempeño bursátil, incluso negativo en términos reales.

Por su parte, Pedro Siaba Serrate, jefe de Research & Strategy de la firma Portfolio Personal Inversiones, señaló a EFE que «la mayoría de las empresas del sector financiero no lograron superar en rendimiento a la inflación, golpeadas por la crisis de la deuda en pesos» que eclosionó en junio-julio.

RENTA FIJA EN ROJO

A medida que las inversiones en renta variable tuvieron un año notable, las apuestas por los títulos públicos argentinos no lograron un saldo positivo, en parte por las expectativas de mayor devaluación del peso argentino y por los temores a una eventual reestructuración a futuro.

En los últimos meses la deuda argentina ha comenzado a recuperar algo de terreno, sin embargo, aun así, concluye 2022 con un rendimiento acumulado real negativo.

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«La deuda argentina está cerrando el año en rojo a lo largo de la curva, exhibiendo una baja de 17,7 % en el precio promedio ponderado de los bonos Globales y de 18,4 % para los Bonares«, afirmó Siaba Serrate.

Sin embargo, el comportamiento más reciente de los Globales argentinos, que «hilvanaron tres meses consecutivos de subas«, permite ser «más optimistas respecto al futuro«, afirmó el experto.