Las plataformas digitales Twitter y YouTube podrían ser remplazadas más pronto que tarde en la Unión Europea: desde el pasado abril, la comunidad europea está ya trabajando para lanzar dos app que permitan a Europa dejar de depender de los gigantes estadounidenses.

Dichas redes sociales están basadas en la actividad de Twitter y YouTube: bautizadas como UE Voice y UE Video, tienen el objetivo de potenciar una estructura digital europea propia con la que reforzar la privacidad y protección de los datos personales de los usuarios. 

De esta manera , UE Voice sería la plataforma sustituta de Twitter, mientras que UE Video sería el sustituto de YouTube. La idea es que la primera se pueda convertir en una plataforma parecida a la red social del pájaro azul, pero con una mejora de la libertad de expresión y unas normas de conducta. Al estar desarrollada en Mastodon, una red social de código abierto, que permite que el organismo europeo no tenga por qué recopilar datos de los usuarios.

UE Video, por su parte, estará basada en Peertube, una red de código abierto, y servirá para subir podcasts, vídeos y otros contenidos audiovisuales sin necesidad de depender de Google.

Wojciech Wiewiórowski, Supervisor Europeo de Protección de Datos, explicó hace unos meses: «Con el lanzamiento piloto de EU Voice y EU Video, pretendemos ofrecer plataformas alternativas de medios sociales que den prioridad a las personas y a sus derechos a la intimidad y a la protección de datos».

«En concreto, esto significa, por ejemplo, que EU Voice y EU Video no se basan en transferencias de datos personales a países fuera de la Unión Europea y del Espacio Económico Europeo; no hay publicidad en las plataformas; y no se elaboran perfiles de las personas que pueden utilizar las plataformas. Estas medidas, entre otras, dan a los individuos la posibilidad de elegir y controlar cómo se utilizan sus datos personales«, agregó.

Objetivo: defender la privacidad y seguridad

Algunos especialistas consideran que desligarse de las tecnológicas americanas evitará que la información personal de los usuarios recaiga en manos de todopoderosos como Elon Musk o Mark Zuckerberg, lo que repercutirá positivamente en la seguridad y la privacidad de los ciudadanos. Ambas plataformas, además, no contendrán publicidad.

Asimismo, otra de las razones por las que la UE está impulsando la autonomía tecnológica y digital es el cambio en la normativa que ya se puso en marcha con la entrada en vigor de Ley de Servicios Digitales (DSA). Con el objetivo de proteger la privacidad de los internautas, esta nueva ley pretende obligar a redes sociales como Facebook, YouTube o TikTok a acabar con la desinformación y las cuentas falsas.

Las compañías que no lo cumplan se enfrentarán a multas de hasta un 6% de sus ingresos anuales, una cantidad que podría ascender a millones de euros en el caso de las grandes compañías.