La Unión Europea se comunicó este viernes con los ministros de Finanzas del G20 con el fin de abordar las consecuencias de la guerra en Ucrania para la economía global, en particular el riesgo de una crisis alimentaria, y resaltó que los países más vulnerables son los que más las sufrirán.

«Que no haya dudas: es debido a la guerra de Rusia que la recuperación de la economía global afronta ahora un importante retraso», afirmó el comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni, en una intervención por videoconferencia durante la reunión de los ministros del grupo de las veinte mayores economías del mundo en Bali (Indonesia).

Los «riesgos clave» para la perspectiva global «dependen de la evolución de la guerra iniciada por Rusia«, insistió el italiano, citando entre estos el aumento de los precios de las materias primas, la escasez de alimentos y las prolongadas perturbaciones en las cadenas de suministros.

«Son los países más vulnerables los que se prevé que sufran las peores dificultades», resaltó Gentiloni, quien instó al G20 a atajar en sus estrategias de recuperación no solo el impacto de la covid-19, sino además, el del conflicto en la economía global.

El comisario dijo que la «preocupación inmediata» de la UE son «la escasez de alimentos y la inseguridad alimentaria global debido a la guerra» y defendió que, contrariamente a la «desinformación que sale de Moscú«, la sanciones comunitarias no están detrás de estos problemas.

«Nuestras sanciones a Rusia no se dirigen a los alimentos. Permiten el flujo libre de productos agrícolas. Estamos trabajando en Vías de Solidaridad para asegurar que las exportaciones pueden salir de Ucrania. Además, movilizaremos 600 millones de euros adicionales en apoyo a los países más afectados«, apuntó.

Por su parte, el representante del Ejecutivo de la UE llamó asimismo a una «fuerte coordinación de las políticas» entre los socios del G20 en un escenario de empeoramiento de las previsiones económicas, tal como reflejan las presentadas ayer por la Comisión, que recortaron al 1,5 % del crecimiento de la UE el año próximo y elevaron al 8,3 % la tasa de inflación para este mismo 2022.

En conclusión, Gentiloni insistió en que los países de la eurozona continuarán prestando apoyo este año a los más vulnerables para mitigar los efectos de la crisis energética como medidas «específicas y temporales» y estarán listos para reaccionar con su política fiscal a la situación cambiante.

Llamó de igual forma a seguir invirtiendo en la transición digital y ecológica en un momento en que «las extremas condiciones meteorológicas que vemos en todo el mundo son un duro recordatorio de que tenemos que seguir trabajando para lograr cero emisiones de efecto invernadero».

Como hace la UE en cada foro internacional desde el inicio de la invasión rusa de Ucrania, el comisario condenó la agresión y pidió el fin inmediato de la misma.