La aerolínea lusa TAP prevé una reducción de 93% en sus operaciones durante febrero, respecto al año pasado, por las restricciones de movilidad que se impusieron de nuevo en Portugal, dejando solamente habilitados los vuelos nacionales hacia comunidades portuguesas.

Así lo informó la empresa en un comunicado emitido por la Comisión del Mercado de Valores Mobiliarios (CMVM), donde señalan que TAP tenía previsto una baja en la actividad de 73%, pero que las nuevas medidas hicieron elevar el porcentaje.

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Así las cosas, TAP mantendrá las conexiones en el mercado interno (Lisboa, Oporto, Madeira y Azores) y vuelos a Newark y Boston (Estados Unidos); Toronto (Canadá); Madrid, Barcelona.

De igual forma con Málaga y Valencia (España); Ámsterdam (Países Bajos); Bruselas (Bélgica); Ginebra y Zúrich (Suiza); Luxemburgo; París, Niza, Toulouse, Marsella y Lyon (Francia), y Milán y Roma (Italia).

Además tendrá vuelos con Bisáu (Guinea-Bisáu), Conakri (República de Guinea), Dakar (Senegal), Maputo (Mozambique), Santo Tomé y Príncipe y Praia y San Vicente (Cabo Verde), reseña el comunicado.

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