El número de estadounidenses que presentó nuevas solicitudes de subsidio de desempleo bajó menos de lo esperado la semana pasada, tocando un mínimo de cuatro meses, ya que la mejora del entorno de salud pública permite la reapertura de más segmentos de la economía, lo que supone la recuperación del mercado laboral.
Las peticiones iniciales de subsidios de desempleo estatales disminuyeron 42.000, a una cifra desestacionalizada de 712.000, para la semana que terminó el 6 de marzo, el nivel más bajo desde principios de noviembre. Los economistas encuestados por Reuters habían pronosticado 725.000 solicitudes.
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Los datos de la semana anterior se revisaron para mostrar 9.000 solicitudes más de las que se habían comunicado.
En cuanto a las solicitudes no ajustadas, cayeron 47.170 a 709.458 por los descensos de Texas, Nueva York y Misisipi, donde los pedidos habían aumentado antes por las duras condiciones meteorológicas.
Incluyendo un programa financiado por el gobierno para los autónomos, los trabajadores por proyecto y otros que no reúnen los requisitos para los programas estatales regulares, 1,2 millones de personas presentaron solicitudes la semana pasada.
El informe semanal de solicitudes de subsidio de desempleo del Departamento del Trabajo publicado este jueves también mostró que 20.1 millones de estadounidenses cobraron cheques de desempleo a finales de febrero.
Aunque las reclamaciones han caído desde un récord de 6.867 millones en marzo de 2020 cuando la pandemia golpeó a los Estados Unidos hace poco más de un año, están por encima de su pico de 665.000 durante la Gran Recesión de 2007-09 y podrían permanecer elevadas debido a la expansión de los beneficios por desempleo.
En un mercado laboral que funcione bien, las reclamaciones normalmente oscilan entre 200.000 y 250.000.
Por otra parte, se espera que la demanda interna aumente en los próximos meses, después de que el Congreso de Estados Unidos aprobó el paquete de recuperación del presidente Joe Biden, de 1.9 billones de dólares, que enviará nuevas ayudas a las pequeñas empresas, así como cheques de 1.400 dólares a la mayoría de los hogares de ingresos bajos y medios.
Además habrá un suplemento de desempleo de 300 dólares semanales financiado por el gobierno hasta el 6 de septiembre.
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Con información de Reuters
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