En el mes de mayo, los precios al productor registraron su cuarta aceleración consecutiva en medio de la incertidumbre generada por la pandemia, la guerra en Europa y los cuellos de botella en el mundo, de acuerdo con los datos presentados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
En consecuencia, el quinto mes del año, el Índice Nacional de Precios al Productor (INPP), incluyendo petróleo, indicó un aumento mensual de 0.93%, mientras que a tasa anual los precios a los productores vieron un alza de 10.52%.
La tasa resultó mayor al incremento de 10.40% anual de abril, la cual es la mayor tasa que se registra desde marzo del 2017, cuando el INPP alcanzó un nivel de 10.67%.
Alejandro Saldaña, subdirector de Análisis Económico de Ve por Más (Bx+), delcaró que los precios al productor se siguen viendo afectados por la invasión de Rusia a Ucrania, la cual comenzó a finales de febrero pasado.
Saldaña agregó: “Los precios de fertilizantes y transporte en contenedores cedieron algo, pero siguió la presión en los precios del petróleo y los granos”.
Bajo esta línea, Gabriela Siller, directora de Análisis Económico de Banco Base, expuso que con estos resultados es probable que las presiones inflacionarias a los consumidores continúen.
“La presión continua sobre la inflación al productor implica que los productores y vendedores finales podrían seguir traspasando incrementos en costos hacia los consumidores finales a un ritmo gradual, lo cual seguiría presionando la inflación al consumidor”, agregó.
Por su parte, el Inegi también se pronunció sobre el Índice de Mercancías y Servicios de Uso Intermedio, incluyendo petróleo, el cual incrementó a una tasa mensual de 1.43%, mientras que en su comparación anual el aumento fue de 13.15%.
En el caso del Índice de Mercancías y Servicios Finales, además incluyendo petróleo, en relación con abril aumentó 0.72%, mientras que en comparación con el mismo mes del año previo el aumento fue de 9.48 por ciento.
Agropecuarios, con el mayor incremento
Al interior del informe del instituto de estadística se notó que, por actividades económicas, fue en las actividades primarias, relacionadas a la agricultura, pesca y caza, las que presentaron los mayores incrementos, con una tasa anual de 14.08%.
Le persiguieron las actividades secundarias, en donde el aumento de precios a los productores a nivel nacional promedió 13.10%.
Referente a éstas, la minería fue la que tuvo una mayor inflación, con una tasa de 38.62 por ciento.
Por ende, la industria de la construcción igualmente mostró un aumento de dos dígitos en los precios, con una tasa de 16.70 por ciento.
En el caso del sector servicios, la inflación anual a los productores fue de 4.94 por ciento. Al interior, subrayó el incremento de dos dígitos en los servicios de alojamiento temporal y de preparación de alimentos, de 10.22 por ciento.
Finalmente, el transporte, correo y almacenamiento mostró una tasa de 6.85%, seguido de servicios de esparcimiento culturales y deportivos, con 5.49 por ciento.
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