Los precios al productor en Estados Unidos crecieron más de lo estimado en septiembre, justo cuando hay un incremento en el costo de alojamiento en los hoteles y moteles, que llevó a la primera subida interanual desde marzo pasado.

Así lo mostró un informe del Departamento del Trabajo divulgado este miércoles, que también señaló un incremento en el precio del hierro y la chatarra de acero. Sin embargo, el documento no cambió la idea de que la inflación generalizada se va frenando cuando hay excesos en la capacidad industrial.

En contraparte, confirmó las preocupaciones por una deflación, que domina desde que inició la pandemia.

“Los valores de algunos precios al productor están subiendo, pero las fábricas aún no han vuelto a la normalidad”, dijo Chris Rupkey, economista jefe de MUFG en Nueva York. “Las autoridades de la Fed se mantendrán cautas sobre el panorama de inflación hasta que las presiones de precios al productor aumenten aún más”. Así reseña Reuters.

El índice de precios al productor (IPP) para la demanda final creció 0,4% el mes pasada, tras la subida de 0,3% en agosto. La subida de 0,4% en servicios fue de casi dos tercios de la ganancia registrada en el IPP de septiembre.

Dejando fuera los componentes volátiles en alimentos, energía y servicios comerciales, los precios al productor ganaron un 0,4% en septiembre. El denominado IPP subyacente se había incrementado en 0,3% por tres meses seguidos. En los 12 meses a septiembre, el IPP subyacente avanzó un 0,7%, tras el 0,3% a agosto.

Con información de Reuters.