Los precios al consumidor de Brasil aumentaron 0,72% en julio, con respecto al mes anterior, ubicándose por encima de las proyecciones de los analistas de 0,66% en la primera quincena de julio, según los datos publicados este viernes por el instituto nacional de estadísticas.

Con la cifra, la inflación anual subió a 8,59%, más del doble del objetivo de 3,75% para este año, incrementando las apuestas de que el banco central subirá su tasa de interés de referencia en 100 puntos básicos el próximo mes.

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El organismo explicó que los precios de la vivienda aumentaron 2,14% en el séptimo mes de 2021 debido al alza de los costos de la electricidad, mientras que los precios del transporte subieron 1,07%, representando los principales motores de la inflación en el mes.

El banco central ha elevado la tasa de referencia Selic al 4,25%, en su intento de que la inflación vuelva a su objetivo el próximo año, pero estos esfuerzos se han visto complicados por el aumento de los precios de las materias primas, mientras muchos recursos internos, como el petróleo y el mineral de hierro, enfrentan una alta demanda ante la reapertura del mundo tras los cierres por la pandemia.

Brasil también se ha visto afectado por una sequía histórica, que ha causado un alza en las facturas de los servicios públicos.

En ese sentido, los responsables de la política monetaria se han comprometido a aumentar los costos de endeudamiento en al menos otros 75 puntos básicos cuando fijen las tasas el 4 de agosto. Sería la cuarta alza consecutiva de esa magnitud, pero los inversionistas apuestan cada vez a que el aumento será mayor.

 

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Con información de Bloomberg

 

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