Amanda Betancourt. La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA), que representa a la mayoría de las principales aerolíneas y compañías de carga del mundo, declaró que no espera que la industria del transporte aéreo se recupere del golpe que le ha supuesto la pandemia del coronavirus antes del 2024.

Ese plazo, que define la «recuperación» como el regreso a los niveles de tráfico e ingresos de 2019, es el más grave que ha ofrecido hasta ahora el grupo, que habia pronosticado previamente un retorno para 2023.

El grueso del problema es que el público de los aviones tiene relativamente poco interés en volar. «Mientras que existe una demanda acumulada de VFR (visitar amigos y parientes) y viajes de ocio, la confianza del consumidor es débil frente a las preocupaciones sobre la seguridad del trabajo y el aumento del desempleo, así como los riesgos de contraer el COVID-19», dijo la IATA en un comunicado de prensa.

Además, los viajes corporativos que no se realizan porque las empresas buscan reducir los costos y adaptarse a las reuniones a distancia obstaculizarán la recuperación, dijo la IATA. Incluso cuando la economía se recupere, los viajes de negocios pueden tardar en volver.

 

Los expertos aseguran que en el aire, la vuelta a la normalidad será larga.

En los primeros meses de la pandemia, la mayoría de las aerolíneas sugirieron un plazo de 2 a 3 años para la recuperación.

«Esperamos que tome de 2 a 5 años recuperar los niveles del 2019», escribió la analista Helane Becker de Cowen en un extenso informe del 13 de abril titulado Un sinuoso camino hacia la recuperación, añadiendo: «nuestra suposición de trabajo es que los ingresos del 2021 volverán a los niveles del 2016».

«Desafortunadamente, el regreso al trabajo podría no significar el regreso inmediato al aire», añadió. «Es muy probable que cualquier recuperación no empiece hasta el cuarto trimestre como muy pronto, y luego continúe lentamente hasta el 2021 y hasta el 2022».

Otros analistas destacados, como Jamie Baker de JPMorgan y Andrew Didora de Bank of America, también siguen sugiriendo un calendario similar, apuntando a objetivos de 3-4 años en notas de investigación recientes.

 

 

Con información de EFE.