El país nicaraguense alargó al congelamiento de los precios de los combustibles para alcanzar las 25 semanas seguidas de estabilidad, declaró este sábado el Instituto Nicaragüense de Energía (INE) y el Ministerio de Energía y Minas.
La decisión aprobó que en el transcurso de siete días a partir de este domingo, el costo del galón (3,78 litros) de gasolina superior, usada en automóviles ligeros, se mantenga en 5,13 dólares; y el de la gasolina regular, aplicado en automóviles de vieja data y todoterrenos, continúe en 5,02 dólares; mientras el diésel, utilizado en el transporte de carga y colectivo, se sostenga en 4,54 dólares.
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Asimismo, los precios del Gas Licuado de Petróleo (GLP), que también se mantendrán congelados, dependen del tamaño del tanque y del departamento (provincia) donde se comercializan, confirmó el INE.
Por su parte diésel, los dueños de automóviles tendrán un ahorro equivalente a 0,58 dólares por galón, de acuerdo las autoridades nicaragüenses, que no especificaron el ahorro en los otros combustibles.
Los combustibles para el transporte y la preparación de alimentos se mantienen congelados en Nicaragua desde inicios de abril pasado.
La finalidad de mantener congelados los precios de los combustibles es «mitigar el impacto del incremento de estos precios en la economía de las familias nicaragüenses», según el INE.
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Conforme con el Ejecutivo, al asumir el 100 % de las alzas en los precios de los combustibles y del gas licuado de cocina, el Estado de Nicaragua desembolsa entre 4 y 6 millones de dólares semanales.
En contexto, Nicaragua cuenta con un fondo de 200 millones de dólares como parte de una línea de crédito de hasta 800 millones de dólares, dispuesta por el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) para financiar un programa regional de apoyo ante el alza global de precios de los combustibles.
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