La presidente de Consecomercio, Tiziana Polesel, dijo que el costo de las máquinas fiscales nuevas adecuadas para el cobro del Impuesto a las Grandes Transacciones Financieras tiene un costo de unos 1.000 dólares. Enfatizó que algunos comerciantes no han podido adecuarse para pagar este impuesto debido a que algunas máquinas fiscales no admiten la modificación necesaria.

Nota relacionada Cámara de Comercio de Caracas califica de “caos total” primera semana de aplicación del IGTF

Polesel consideró que la aplicación de IGTF, previsto desde el 28 de marzo, se ha convertido en un inconveniente para los comerciantes porque su aplicación ha sido apresurada y no ha permitido que las empresas se adapten. Expresó:

«Esto ha significado un problema y solicitamos la prórroga de esta aplicación porque no hemos tenido tiempo, ni recursos para poder implementarlo. Tenemos muchísimas dudas, el Ministerio de Finanzas hizo una reunión y un taller, pero quedaron dudas y muchas interrogantes: ¿Cómo aplicaremos el impuesto? ¿Qué pasa cuando la factura tiene diferentes formas de pago? ¿Qué pasa cuando una factura es a crédito? Y lo más grave son las máquinas fiscales, no todos han podido adaptar el software y hay otras máquinas fiscales que no admiten esa modificación y deben cambiar la máquina, deben pagarla de contado y cuentan unos 1.000 dólares».

Nota relacionada Supermercados comienzan a implementar impuesto IGTF

Explicó que ese incremento al consumidor por el cobro del IGTF “puede llegar al 12%”, puesto que viene en cascada. La líder gremial recalcó:

«Este impuesto afecta indistintamente a la cantidad de la transacción. Los comerciantes no nos negamos a pagar impuestos».

Sin embargo, la representante del sector terciario acotó que no fueron consultados: «Cuando un impuesto no se entiende, entramos en el terreno de la irracionalidad».

Nota relacionada José Ignacio Guarino: Es bastante complicado que se pueda evadir el pago del IGTF «porque te conviertes en un sujeto más supervisado»

En cuanto al tema del efectivo, Polesel dijo que sigue siendo muy complicado ir a un banco y obtener bolívares, puesto que continúa «restringido al consumidor conseguir la moneda nacional, así como al comerciante».

Dijo que los comerciantes adaptaron sus procesos: “Quisiéramos trabajar con una sola moneda, nuestra moneda, pero eso es complicado”.

“Ese camino de restablecer la confianza no es rápido, estamos en vía de restablecer la confianza en nuestra moneda, pero no es fácil”.