Así lo revelan las cifras del uso de mezcladores de criptomonedas, que se han disparado a 800 millones

El uso de las criptomonedas para el blanqueo de capitales y las actividades delictivas es uno de los puntos negros de un mercado de alrededor de 1 billón de dólares de valor total, que ha sido adoptado por todo tipo de público en los últimos dos años y que, sin embargo, sigue teniendo fama de ser pasto de ‘hackers’ y defraudadores. Las autoridades estrechan el cerco sobre las transacciones con estos activos para evitar precisamente que se produzcan delitos y se esfuerzan en rastrear todas las transacciones, pero hay puertas traseras que sortean el escrutinio de las autoridades.

En concreto, un análisis de StockApps.com, indica como el uso de herramientas como los ‘mixers’ del bitcoin ha tocado un nuevo máximo de 800 millones de dólares en el segundo trimestre de 2022. Esto implica que los fondos de las billeteras pertenecientes a grupos sancionados por el estado y la actividad ilegal casi se han duplicado.

Nota relacionada Michael Saylor (MicroStrategy) atacó al ether y calificó el Bitcoin Cash como «un horrible error»

El análisis refleja que la mayor parte del incremento se debe al aumento del volumen de señales recibidas de direcciones asociadas a actividades ilegales. Algunas de esas actividades ilegales incluyen estafas con criptomonedas y ataques de ransomware. También se suma el dinero confiscado a las víctimas por organizaciones designadas por el gobierno estadounidense. Además, los volúmenes enviados desde intercambios centralizados o protocolos DeFi también aumentaron.

El análisis sugiere que las empresas de Rusia y Corea del Norte sancionadas por EEUU encabezan la lista. Además, los delincuentes que promueven planes de inversión en bitcoins están impulsando el aumento de los volúmenes ilegales.

Nota relacionada La actualización Merge Shadow de Ethereum impulsa a Ethereum Classic

Una de las organizaciones sancionadas es Hydra, un mercado ruso de la web oscura donde los delincuentes pueden comprar y vender bienes y servicios. El resto de los datos proceden de entidades como el grupo de piratas informáticos norcoreano Lazarus y la empresa de compraventa de criptomonedas Blender.io.

¿Qué son los ‘mixers’?

Bit2Me Academy describe estas herramientas como una función especial diseñada por la comunidad ‘cripto’ para permitir a los usuarios de criptomonedas no centradas en el anonimato mezclar sus monedas con la de otros usuarios para obtener un mejor nivel de privacidad, evitando así el rastreo y marcaje de dichas monedas por parte de entidades centralizadas y las actividades que sus usuarios han tenido con las mismas.

No obstante, aunque se trata de una herramienta muy útil los llamados mezcladores de criptomonedas gozan de una mala reputación, «ya que en ocasiones se usan para esconder prácticas ilegales, como el robo y hackeo de fondos. Así que es muy probable que si en algún momento escuchas hablar sobre ellos, no sea de forma positiva», escriben desde Bit2Me.

Los mezcladores tienen una alta adopción por una razón y es, según explica Edith Reads, de StockApps, porque «los mezcladores o ‘tumblers’ son dispositivos que crean una separación entre el dinero que un usuario deposita y los fondos que el usuario retira. Hacen que las transacciones de criptomonedas sean más difíciles de seguir la pista». «Los ‘mixers’ combinan el dinero depositado por un gran número de usuarios y luego lo mezclan al azar. Garantizan que las transacciones sean imposibles de rastrear», enfatiza.

Nota relacionada Los creadores de Minecraft dejarán de dar soporte a los NFTs dentro del juego

La cantidad de bitcoins que manejan estos mezcladores varía diariamente. Por ello, los investigadores han comprobado que el uso de mediciones más amplias es fructífero. A mediados de abril, la media móvil de 30 días de fondos recibidos por los mezcladores alcanzó un máximo histórico de 51,8 millones de dólares. A estas alturas del año, los volúmenes de entrada eran casi el doble que en 2021. Además, este año, las direcciones de billetera ilegítimas representaron el 23% del efectivo transmitido a los mezcladores, frente al 12% de 2021.

Algunos mezcladores ofrecen una capa adicional de privacidad. Permiten a los usuarios retirar dinero en efectivo en diferentes cantidades y transmitirlo a múltiples direcciones de monederos. Hacen hincapié desde StockApps en que el uso de un mezclador ‘per se’ «no constituye un acto inmoral o ilegal». «Hay razones válidas por las que una persona puede desear proteger su privacidad mediante el uso de criptomonedas».

Sin embargo, reconocen que «los mezcladores se han convertido en una pieza indispensable para los ciberdelincuentes«. «Lo utilizan para blanquear sus ganancias sin llamar la atención de las autoridades. Esto se debe al uso generalizado de las criptomonedas en las actividades ilegales en línea», explican.

Fuente: Bolsamanía.