La pandemia del coronavirus ha intensificado la crisis económica que venía arrastrando Argentina, lo que ha llevado a casi la mitad de la población a la pobreza, según estimaciones privadas.

Para el año 2018 la crisis financiera había afectado principalmente a las empresas de baja escala que producen para el mercado doméstico, golpeando a las clases media y baja, y llevando el desempleo al 13,1%. Tras la cuarentena aplicada por el Gobierno de Argentina a partir de marzo, la pobreza subió en el segundo trimestre del año al 46% o 47%.

Estos datos fueron  proporcionados por Agustín Salvia, investigador especializado en pobreza de la Universidad Católica de Argentina (UCA), que elabora su propio indicador sobre el tema. Quien aseguró que “Hay mayor pobreza general, todos somos un poco más pobres -ya lo éramos el año pasado-, con mayor desigualdad”.

El experto declaró en una entrevista realizada por Reuters, que atribuye este fenómeno a la pérdida de 3,5 millones de puestos de trabajo, mayormente informales, durante la pandemia, cuando la economía se derrumbó un 19,1%.

En tanto, el organismo oficial de estadísticas, Indec, señaló que en los últimos seis meses del 2019, la pobreza alcanzaba al 35,5% de los argentinos.

Un adulto necesita 14.718 pesos (193 dólares) mensuales para no ser considerado pobre en Argentina.

Hace solo semanas, el Gobierno de Alberto Fernández llegó a acuerdos con sus acreedores para reestructurar casi 110.000 millones en deuda pública. Pero la tormenta financiera no ha cedido en medio de la incertidumbre sobre las severas dificultades fiscales.

El país cuenta con amplios programas de asistencia social, aunque resultan insuficientes para acabar con la pobreza e insostenibles a largo plazo en medio de la crisis.

El economista Andrés Asiain dijo que “Para salir de esta crisis de pobreza se exige mucha imaginación de parte de los gobernantes. No va a ser suficiente lo que eran los programas electorales tradicionales: un poquito de obra pública y una mejora leve del salario”.

Por su parte, Salvia, el experto de la UCA, es muy probable que la pobreza siga afectado a alrededor del 45% de los argentinos al finalizar el año. “Llegar al 35% que teníamos antes de la crisis, que ya era un escándalo, no lo veo posible este año ni el año próximo”, señaló.

Con información de Reuters