El níquel de referencia de la Bolsa de Metales de Londres (LME) escaló un 15% el miércoles, alcanzando su límite de negociación, por lo que atenuó la tendencia y operaba con alzas por primera vez desde que se suspendieron los negocios con el metal la semana pasada.

El níquel en la LME ganó un 5,5% en la apertura y se mantuvo en niveles máximos durante las primeras horas de negociación, pero se disparó en casi 3.000 dólares en un lapso de unos 20 minutos.

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El metal industrial alcanzó su techo de negociación de 32.380 dólares la tonelada y a las 1200 GMT seguía operando en ese umbral.

Un operador dijo que no estaba claro qué había detrás del salto repentino, pero que podría deberse a los sistemas de negociación automatizados.

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«En cualquier caso, el mercado subyacente está ajustado, entonces, si se tiene en cuenta la incertidumbre rusa, me parece barato», declaró.

El níquel se desplomó durante varios días y alcanzó repetidamente sus límites mínimos después de que se reiniciaron los negocios tras una pausa para calmar el mercado.

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Los volúmenes de níquel en la LME se han recuperado desde el martes, lo que sugiere que el mercado está comenzando a volver a la normalidad después de dos semanas de caos.

El principal centro de transacciones de níquel del mundo sufrió un aumento récord de precios, una suspensión de cotizaciones de seis días y luego un reinicio afectado por fallas técnicas.