El Gobierno del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, aumentó el impuesto a las transacciones financieras, con el fin de ampliar la asistencia a las familias de menores recursos.
El aumento en el tributo, que tasa a las personas físicas y jurídicas y que es de casi 1%, llevará al impuesto a un 3% anual, y estará en vigor hasta el 31 de diciembre del corriente año.
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El Ministerio de Economía explicó que el valor adicional que será recaudado permitirá aumentar los subsidios de un programa asistencial que atiende a unas 14 millones de familias de escasos recursos que reciben hoy unos 190 reales (38 dólares) por mes, reseña la agencia Efe.
Según el secretario especial de presupuestos del Ministerio de Economía, Bruno Funchal, se planea que los subsidios se eleven a los 300 reales, o 60 dólares, entre noviembre y diciembre, esperando que el Gobierno oficialice un nuevo programa social.
El aumento fue mal visto por los mercados y otros sectores empresariales, que lo vieron como un “paso atrás” en el camino liberal prometido por el Gobierno de Bolsonaro.
Y fue tanto, que a media jornada, la Bolsa de Sao Paulo cayó casi un 2 %, un movimiento atribuido a la incertidumbre que genera la decisión de aumentar impuestos, algo a lo que Bolsonaro.
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Con información de EFE.
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