Más de 500 cerdos murieron el domingo en Mendoza después que se registrara una fuerte interrupción en el suministro eléctrico. El impacto del corte de energía fue devastador para un establecimiento porcino en la localidad de Real del Padre, en el departamento de San Rafael. Se estima una pérdida económica cercana a los 10 millones de pesos.

Los animales murieron asfixiados después que se cayera la línea eléctrica que provine del río El Nihuil, una situación que se vio agravada al no entrar en funcionamiento el generador de emergencia. El establecimiento afectado pertenece a Orlando Piccinini, quien comercializa su producción en un local para la venta que tiene en General Alvear bajo el nombre de ‘Il Porco”.

La interrupción de la energía “en un criadero confinado intensivo es letal, porque entre la temperatura que se genera y el gas de las mismas heces de los animales, los más jóvenes se envenenan y mueren asfixiados”, explicaron productores de la zona.

Las horas sin funcionamiento de los extractores de aire en las naves de cría provocaron la tragedia, por la cual se iniciarían acciones legales contra la empresa que suministra energía, según consignó la agencia Télam.

La situación representa un gran perjuicio económico. Cuando ocurre una muerte repentina sin que el animal sea faenado, el organismo del cerdo se descompone, se hincha y deja de ser apto para consumo.”Es un proceso instantáneo. Son animales que ya no sirven como alimento y tienen que ser incinerados”, explicó un miembro de la Cámara de Comercio de General Alvear.

Fuente: La Nación