A pesar de la crisis galopante en Venezuela, donde se estima un cierre de año con más de 3.000% de inflación; es difícil que el país caribeño vuelva a reportar inflaciones de tres dígitos como las registradas en el segundo trimestre de 2018, pues se han cambiado políticas que alimentaban ese flagelo.

Así lo considera el economista venezolano y director de Capital Market Finance, Jesús Casique, quien en una entrevista exclusiva con TheMoneyPost explicó:

“Es difícil que Venezuela vuelva a reportar estas inflaciones del segundo trimestre del 2018 de tres dígitos. Es difícil porque en primer lugar, el gobierno viene violando el artículo 320 de la Constitución, donde hay un párrafo que indica que el BCV no estará subordinado a directivas del Ejecutivo. El BCV continúa monetizando los déficits de Petróleos de Venezuela (PDVSA), pero no como otros tiempos, ha disminuido el nivel de monetización a PDVSA. La liquidez monetaria tampoco ha venido acelerando como en otros tiempos, ha disminuido el ritmo de crecimiento de la liquidez monetaria”.

En 2018, la hiperinflación en Venezuela fue bastante marcada. Se llegó a cifrar un 233,5% de inflación, por ejemplo, en septiembre. También hubo picos que mostraron la gravedad de la crisis económica en el país caribeño. Ese año, la acumulada fue de 1.698.844,2%, de acuerdo a la Asamblea Nacional, de mayoría opositora.

Tres años después, la inflación rebajó notablemente. En septiembre 2020 fue de 27,9%, según el Banco Central de Venezuela (BCV) que comenzó a publicar cifras que desvarían un poco de las emitidas por el Parlamento. Según la AN de Venezuela, la cifra fue de 30%.

Y sin embargo, Casique augura: “Podemos observar que la inflación en Venezuela va a cerrar superior al 3.000% en el 2020”.

Esto hace entender que la hiperinflación se mantiene y de hecho, habrá que esperar hasta julio de 2021 para determinar si el país sigue o no en esa senda de crisis.

Pregunta.- ¿Cómo puede salir Venezuela de la hiperinflación?

Respuesta.- Salir de la hiperinflación depende de la voluntad del gobierno. Si revisamos la teoría de Philip Cagan (1956), la hiperinflación entra cuando hay una inflación superior al 50%, luego, si los tres meses siguientes la inflación es inferior al 50%, podemos determinar o inferir que el país salió de la hiperinflación, pero como Venezuela es un país extremadamente volátil, es muy prematuro indicar que vamos a salir de la inflación los próximos tres meses.

-Hay que esperar un periodo determinado, hasta julio de 2021, para poder determinar si salimos o no; porque viene diciembre. El gasto electoral no va a tener impacto en inflación. No hace falta publicidad ni nada, y aunque el gasto ha disminuido, la inflación se va a pisar porque viene el pago de bonos, aguinaldos, la depreciación del tipo de cambio que es otra variable que afecta a la inflación.

-Los dos tipos de cambio van compitiendo como carritos. En septiembre el paralelo tuvo una depreciación del 29%, y la del BCV fue de 29,8%, prácticamente igual, el comportamiento en el mes pasado comparado con el paralelo, la depreciación fue igual.

-Eso tiene un impacto en la inflación y en la medida que no se establezcan los correctivos que requiere la economía, es extremadamente difícil resolver los problemas macroeconómicos que está atravesando Venezuela. De hecho, hay que establecer anclas de ajustes con un programa macroeconómico holístico, como ancla en lo fiscal (Brasil), monetario (Perú) y tipo de cambio (Argentina). Éste último fracasó y es muy seguro que entren en hiperinflación porque en Argentina están quemando los créditos y ahora están monetizando los déficits.

P.- Muchos afirman que una dolarización puede acabar con la hiperinflación y de hecho, en Venezuela se está llevando a cabo una, pero no formal, que emanó desde los consumidores. ¿Qué puede decir?

R.- La dolarización es una realidad que está atravesando Venezuela por la pulverización del cono monetario. Cuando entró en vigencia el nuevo cono en agosto 2018, era inviable porque el país estaba atravesado por la hiperinflación, y ahí están las consecuencias desde que entró la reconversión en vigencia, la inflación acumulada es de 3.007.112%. Esa reconversión fracasó.

-¿Qué sucede? Que los agentes económicos buscan cobertura para de alguna manera u otra proteger su patrimonio.

-La dolarización llegó para quedarse. Es imposible retroceder y penalizar al mercado que transa en divisas. Es una utopía. La dolarización formal no la veo porque tienes que modificar la Constitución, que dice que la moneda legal en curso es el bolívar.

-Hay dos tipos de dolarizaciones, oferta y demanda. Por demanda, plomeros, taxistas, restaurantes, servicios, todo está dolarizado; pero por la oferta no, el BCV emite bolívares, no dólares y una dolarización formal tampoco la comparto porque nos puede ocurrir lo mismo que Ecuador. Si eliminas el BCV, quedarás supeditado a la Reserva Federal de los Estados Unidos y cualquier embate de la Fed nos afectaría a nosotros porque no tenemos política monetaria.

-Entonces, lo que se resuelve con dolarización formal es la inflación, pero los déficits fiscales, endeudamientos, ahí continúan, como Ecuador, que sigue mostrando déficits fiscales. La dolarización no es la panacea y la solución a los problemas.

-Yo creo que hay que establecer programa holístico, antiinflacionario, pero bien creado, sin tener sesgo de izquierda o de derecha, y generar confianza en el país e instituciones, darle libertad a las instituciones porque la realidad es que están a la orden del día de Miraflores.

P.- Pero, ¿Cómo llegar a ese acuerdo en una Venezuela profundamente dividida y golpeada por la política? Parece una utopía…

R.- No es una utopía porque el gobierno ya se hizo la vista gorda con el tipo de cambio. La ley antibloqueo autoriza la privatización de empresas que fueron confiscadas con (Jorge) Giordiani, hay gran oscurantismo porque no se sabe quién va a tomar esas empresas. Pero la economía pasa factura. Yo recuerdo cuando el gobierno criticaba al paralelo y ahí está la realidad

-El gobierno ha venido flexibilizando algunas restricciones, pero aisladas, porque la decisión que tomó en política monetaria del encaje legal, es una medida que no va a reactivar el aparato productivo. Lo que hizo fue liberar 30 billones de bolívares para el encaje, y lo que había que hace era disminuirlo a 50%.

-El gobierno, en alguna medida, ha sido muy desatinado y en lo que corresponde al tipo de cambio, tuvo que reconocer que el dólar estaba circulando en Venezuela y amenazó con llevarse presos a los venezolanos, bueno, tendrá que llevárselos a todos, porque es la moneda que permite protegerse frente a la hiperinflación.

-El salario tampoco resuelve en su aumento. Ya hemos dicho que tienen que ser aumentados por productividad y no indexados por inflación, pero el mercado obligará al gobierno de alguna manera a dar un giro de 180 grados, porque una recuperación económica (…) queda en manos del gobierno central.

Continúa en una segunda entrega… 

@jherreraprensa