La ida de las petroleras extranjeras Total y Equinor de Venezuela, lejos de evidenciar algo positivo, ayuda a “prender las alarmas” de las demás compañías trasnacionales, para no quedarse en el país por los “diversos riesgos” que representa operar en la nación caribeña.

Así lo sostiene el economista experto en temas petroleros, Rafael Quiroz Serrano, quien conversó con TheMoneyPost.

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“La salida de Total y Equinor es una mala señal desde las perspectivas de los inversionistas petroleros en el país, ayuda a prender las alarmas a las grandes compañías de no quedarse debido a los riesgos de diversa índole. No olvidemos que Petrocedeño es el proyecto más grande la faja y de inversión privada en la historia de Venezuela o desde la nacionalización hasta nuestros días”, indicó.

La semana pasada fue noticia la entrega de las acciones de las petroleras francesa Total y noruega Equinor, a la estatal PDVSA, con quien mantenían el control de Petrocedeño, una asociación que ya tenía más de 30 años.

Recuerda Quiroz que Total tenía unas acciones de 30%, la tercera parte, y Equinor casi 10%.

“Entonces eso también pasa porque son dos petroleras de peso, pero europeas. Poco interés hay en esas empresas los crudos extrapesados, después que se deja un buen tiempo, unos cuantos años, a la aparición y desarrollo de los que es lutitas”, apuntó.

Y añadió: “No hay competencia. Ventajas competitivas o comparativas demuestran que los nuevos yacimientos de petróleo y cuencas petroleras han desviado la atención del capital petrolero internacional hacia ellas, porque son cuencas y proyectos que tienen sus resultados al corto plazo, a diferencia de la faja, que son a mediano y largo plazo”.

Desmitificar la faja

Rafael Quiroz descarta que la Faja Petrolífera del Orinoco (FPO) vaya a desaparecer, pero sí aclara que se seguirá desmitificando “en la medida que las petroleras se vayan yendo”.

“La faja va a tender a ser reemplazada por otros proyectos de explotación petrolera mucho menos costosos y mucho más prácticos y sencillos”, sugirió.

Lamenta que la faja no es la misma “con la cual soñábamos en los 80”.

“A la faja le salieron competidores: cuencas petroleras; que superan a la FPO en términos de inversión, seguridad, incluso en cuanto a beneficios económicos se refiere, y la FPO ya no es la faja que conocimos hace 25 o 30 años”.

“Son muchos los campos y cuencas de lutitas, en Estados Unidos, Brasil, Argentina; hay innumerables proyectos superiores a la faja en términos de costos y en términos de disposición de recursos humanos”, comentó.

¿Pero cuál mito?

Quiroz aclara: “Se demostrará que (la Faja) simplemente ha sido un mito de los últimos años, un mito que creó el “líder intergaláctico” como le llaman”, en referencia a Hugo Chávez, quien pagó para eso “685 millones de dólares en efectivo por adelantado para que certificaran unas reservas abajo del subsuelo de la Faja”.

“Esto le sirvió a Chávez para alimentar su discurso interno, doméstico, y externo, para convencer o engañar a los demás jefes de Estado de que en verdad Venezuela estaba instalada en la cuna de una de las mayores reservas petroleras del mundo”, rememora.

Y por tanto, termina diciendo:

“Eso no es así, y tenemos nosotros todos la obligación de aclarar y decir qué es lo que hay allí: es un crudo extrapesado, de mala calidad, de bajo rendimiento, es mucho menos eficiente que el crudo convencional, es un crudo que por lo malo y costoso en producción (porque el precio de la operación misma hay que agregarle el costo de tener que mezclarlo y mejorarlo, o convertirlo) nadie lo quiere donde está y como está”.

Seguirá la escasez

Consultamos a Quiroz si la escasez de combustibles se mantendría en los meses por venir. Dijo que sí, y no estimó nada positivo para el corto o mediano plazo, pues no hay dinero para la inversión que necesita el parque refinador del país.

“El problema de la escasez de la gasolina va a seguir manteniéndose en el país mientras que no hayan serias y ciertas inversiones en la fase de refinación. Uno de los problemas de la industria petrolera venezolana es que no tiene en este momento la capacidad y músculo financiero para hacer las inversiones necesarias en el área de la refinación”, aclaró.

Y alertó: “Mientras que no haya esas inversiones, que no las va a haber ni en el corto ni mediano plazo, Venezuela no tendrá los combustibles suficientes para atender la demanda del mercado interno y eso se manifiesta en que vamos a seguir viendo colas en las 175 E/S a lo largo y ancho del país, y además de ello, vamos a seguir entendiendo de la nobleza y solidaridad de los países amigos en cuanto puedan suministrar combustible para abastecer el mercado interno venezolano”.

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@jherreraprensa