En las primeras horas de este Domingo de Resurrección se armó la línea de barras de chocolate más larga del mundo en Caripito, estado Monagas, en el Oriente venezolano, bajo el auspicio y organización de la Fundación Nuestra Tierra, y la cual tuvo una longitud final de 854,3 metros a lo largo de la Avenida Nueva Jerusalén, iniciando en la Plaza Bolívar, justo frente a la estatua del Libertador Simón Bolívar, pasando por la Casa Morada, sede principal de la institución monaguense, y culminando su recorrido a los pies del Sagrado Corazón de Jesús en la Plaza de la Fe, donde se ubica el monumento turístico «Yo Amo Caripito».
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Luego de más de 4 meses de planificación que involucró 2 simulacros, la noche del Sábado de Gloria inició el montaje definitivo del metro cúbico de tablas de madera monaguense, trabajada por carpinteros locales, sobre las cuales se apoyaron las barras de chocolate. A las 6 en punto de la mañana del domingo, cerca de 500 personas de todo el país tuvieron 5 minutos para ubicar un total de 4289 barras de chocolate de 135 gramos, para las que se emplearon 800 kg de cacao y una tonelada de chocolate.
50 supervisores y 5 coordinadores acreditados por Guinness World Records Limited, certificaron el intento organizado por la Fundación Nuestra Tierra, el cual representa un histórico cuarto registro impuesto por la institución, tras las plusmarcas de la Moneda de chocolate más grande, la cata de chocolate más numerosa y el mosaico de barras de chocolate más grande del mundo.
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Según Leudys González, presidente de la Fundación Nuestra Tierra, estas acciones contribuyen a “incentivar la producción de cacao para que los productores vendan más, generando a su vez, insumos necesarios para garantizar el éxito de su trabajo”. También dio a conocer la importancia de las Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP) otorgada por el Servicio Autónomo de Propiedad Intelectual (SAPI), como garantía de que el producto es de alta calidad por sus características. Dicho atributo incrementa su reputación y estatus en el mercado internacional.
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En el mismo orden de ideas, González manifestó que dichos nombramientos fungen como partida de nacimiento para el cacao caripiteño, proporcionándole trazabilidad a nivel internacional, generando oportunidades de negocio y dinamizando la economía del municipio Bolívar del estado Monagas. De igual manera, la especialista hizo mención a la calidad genética del fruto, la cual se complementa con estudios efectuados por la Universidad de Oriente (UDO), la cual evaluó los suelos de la localidad, mientras que la Universidad Central de Venezuela (UCV) analizó el impacto económico que esto significa para el desarrollo de la zona.
Cabe destacar que las exportaciones del sector cacaotero tuvieron un ligero aumento para el 2019 hasta llegar a 1782 toneladas. Sin embargo, durante el 2020 debido a la pandemia esto decayó a 1500 toneladas.
Fuente: Gregorio Rojas (Venevisión).
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