Kristalina Georgieva, presidenta del Fondo Monetario Internacional (FMI), ha advertido sobre el aumento de los riesgos para la estabilidad financiera y la necesidad de vigilancia tras la reciente agitación del sector bancario en las economías avanzadas.

La quiebra del banco californiano Silicon Valley Bank (SVB) el pasado 10 de marzo generó una ola de inquietud en el sector bancario en Estados Unidos y Europa, que tuvo entre sus hitos la apresurada venta de la entidad suiza Credit Suisse a su compatriota UBS hace una semana, o las pérdidas en bolsa del Deutsche Bank.

Nota relacionada: El FMI se atasca en las negociaciones sobre la reestructuración de la deuda de países en desarrollo

«Está claro que los riesgos para la estabilidad financiera han aumentado», declaró Kristalina Georgieva en un foro sobre el desarrollo de China, un evento organizado en Pekín por el gobierno chino.

La compra de Credit Suisse por UBS, pilotada por las autoridades suizas, al igual que las recientes medidas de los bancos centrales para mejorar el acceso a la liquidez, permitieron evitar el pánico, pero no lograron devolver la calma a las plazas financieras.

«Los líderes polticos han tomado medidas decisivas en respuesta a los riesgos que pesan sobre la estabilidad financiera», valoró la directora gerente del FMI en su discurso. «Esas medidas han atenuado en cierto modo las tensiones en los mercados, pero la incertidumbre sigue siendo elevada, lo que subraya la necesidad de permanecer vigilantes», argumentó.

China, la nota positiva

El desarrollo más positivo en la economía mundial este año fue el fuerte repunte económico esperado en China después de que relajó sus estrictos controles de covid a fines de 2022, dijo. El FMI pronostica un crecimiento del 5,2% en China en 2023 en comparación con el 3% del año anterior.

Nota relacionada: El FMI pide a China «recalibrar» su estrategia de Covid cero para impulsar la recuperación

El crecimiento de China representaría alrededor de un tercio del crecimiento mundial este año, dijo. «Un aumento de 1 punto porcentual en el crecimiento del PIB en China lleva a un crecimiento de 0,3 por ciento en otras economías asiáticas», dijo en declaraciones recogidas por Financial Times.

Fuente de: El Economista