Estados Unidos y sus aliados impusieron mañana de este jueves nuevas sanciones a Rusia, conducentes a decenas de compañías rusas de defensa, centenas de miembros de su parlamento y el presidente ejecutivo del mayor banco del país, en un acrecentamiento de la presión de Washington sobre Moscú por la invasión a Ucrania.

El Departamento del Tesoro de Estados Unidos asimismo emitió una guía en su sitio web advirtiendo de que las transacciones relacionadas con el oro que involucran a Rusia pueden ser sancionables por las autoridades estadounidenses, una medida predestinada a imposibilitar que Rusia evada las sanciones.

Un alto funcionario del Gobierno afirmó que «Nuestro propósito aquí es eliminar metódicamente los beneficios y privilegios de los que una vez disfrutó Rusia como participante en el orden económico internacional«.

Asimismo, Estados Unidos y sus aliados han impuesto varias rondas de sanciones, incluidas las dirigidas a los mayores prestamistas del país y al presidente Vladimir Putin, desde que las fuerzas rusas invadieron Ucrania hace un mes en el mayor asalto a un Estado europeo desde la Segunda Guerra Mundial.

Moscú califica el asalto de «operación especial» para desarmar y «desnazificar» a su vecino.

De esta manera, el funcionario dijo que Estados Unidos indicó a Putin de que se enfrentaría a consecuencias rápidas y severas si invadía Ucrania y han cumplido esa amenaza. Adicionó que el país enfrenta una inflación punzante y a un perjuicio económico que lo sacará de entre las 20 principales economías del mundo.

«Rusia pronto se enfrentará a una aguda escasez de ideas, talento y tecnología para competir en el siglo XXI, y Putin se quedará con un fracaso estratégico de su propia cosecha«, dijo el funcionario.