Un conjunto de demócratas del Congreso de EE.UU. exteriorizó este jueves un proyecto de ley para frenar el alza de los precios de la gasolina e imponer mayores restricciones sobre petroleras como Chevron, ExxonMobil y Shell, a las que imputan de estar inflando los precios.
Dicha legislación fue presentada también en las dos cámaras del Congreso por las senadoras Elizabeth Warren y Tammy Baldwin y por la legisladora Jan Schakowsky, todas demócratas.
“Los precios están subiendo y los consumidores están pagando más, mientras que las grandes corporaciones están usando la inflación como una excusa para aumentar sus ganancias”, afirmó en un comunicado Warren, una de las voces más progresistas del Partido Demócrata.
Lo que busca la llamada “Ley de prevención del aumento de precios de 2022” es terminar con todas las subidas arbitrarias de precios, aunque ha ganado repercusión por dirigirse contra las compañías energéticas.
Los demócratas, que controlan las dos cámaras del Congreso, señalan a esas empresas de conservar la producción de la gasolina baja a propósito para aumentar sus beneficios, algo que los gigantes de la energía niegan, debido a que atribuyen el alza de precios a la guerra en Ucrania.
En contexto, el proyecto de ley daría poder a la Comisión Federal de Comercio (FTC, en inglés) y a los fiscales generales de los 50 estados de EE.UU. para investigar las subidas de precios que consideren excesivas.
De igual manera, de aprobarse, la iniciativa obligaría a las empresas públicas a ser más claros y explicar sus subidas de precios a la Comisión del Mercado de Valores de Estados Unidos (SEC, en sus siglas en inglés), detallaron las impulsoras de la medida en un comunicado.
La votación de ese proyecto de ley podría producirse la próxima semana en la Cámara de Representantes, adelantó este jueves en rueda de prensa la presidenta de esa cámara, la demócrata Nancy Pelosi.
En este momento los precios de la gasolina se sitúan en una media de 4,4 dólares el galón (1,16 dólar el litro), muy por encima de los 2,90 dólares el galón (0,77 de dólar el litro) de hace un año, conforme a la Asociación Automovilística de Estados Unidos (AAA, por su sigla en inglés).
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