Alemania tuvo un déficit del PIB equivalente al 3,2% durante el primer semestre del año, debido a la crisis generada por la pandemia del Covid-19. Así lo informó la Oficina Federal de Estadística (Destatis).

El conglomerado de las administraciones central, regional y local, aunado a la caja de seguridad social, gastaron en esos seis meses cerca de 51.600 millones de euros más de los que ingresaron formalmente. En comparación al año pasado, el Estado obtuvo un superávit de 46.500 millones de euros

La oficina revisó además la contracción económica alemana en el segundo trimestre. La caída de 10,1% que anunciaron preliminarmente el 30 de julio, fue más de un recorte de 9,7%. Aun así, es el mayor desplome trimestral de la economía desde que se comenzaron a publicar las estadísticas hace más de 50 años.

Destatis destacó en un comunicado el ¡masivo desplome de la demanda interna e internacional” y señaló que en el segundo trimestre, el consumo privado retrocedió 10,9% respecto al primero; las inversiones en bienes de equipo se desplomaron un 19,6% y la construcción cayó también, aunque de forma más moderada, un 4,2%. Así reseña El Economista.

El comercio exterior, referencia de la primera economía europea, también sufrió una caída. Fue de 20,3, respecto al primer trimestre, y las importaciones sufrieron contracción por un orden del 16,0%.