El congreso chileno aprobó el miércoles un aumento del 14,3% en el salario mínimo propuesto por el gobierno justo cuando el país sudamericano atraviesa una constante presión inflacionaria.

Con 139 votos a favor, la Cámara de Diputados respaldó ajustes realizados por el Senado, con lo que la iniciativa queda para la firma del mandatario Gabriel Boric.

Por lo tanto, el ingreso mínimo mensual pasa a 380.000 pesos chileno (US$ 446) a partir del 1 de mayo y posteriormente a 400.000 pesos chilenos (US$ 468) desde el 1 de agosto.

Dicha intención contiene una cláusula especial que indica que, si la inflación acumulada en 12 meses a diciembre de 2022 supera el 7%, el salario subirá a 410.000 pesos chilenos (US$ 479) a contar de enero de 2023.

Por su parte, el gobierno ha recibido presión para entregar mayores ayudas a los hogares aún afectados por la pandemia de COVID-19 y la pujante inflación.

El Estado aplicará una compensación transitoria a las micro, pequeñas y medianas empresas para graduar el impacto del ajuste.