La inflación de Brasil sobrepaso las perspectivas con el incremento más pronunciado en 28 años para el mes de marzo, debido a que los precios más elevados del combustible pesaron sobre la economía, afectada por la escasez de oferta de crudo tras el conflicto de Ucrania.

El índice de precios al consumidor IPCA escaló un 1.62% desde el mes de febrero, afirmo la agencia de estadísticas del gobierno IBGE, por arriba de un aumento del 1.3% visto en una encuesta de economistas del portal Reuters y con un progreso desde la cifra del 1.01% de febrero.

Este es el aumento más pronunciado del mes desde 1994, antes de la creación de la moneda, el real, lo que subraya las fuertes presiones inflacionarias en la economía más grande de América Latina. En los 12 meses hasta marzo, la inflación se disparó un 11.30%, ante el 10.54% del mes anterior y muy por encima del objetivo de fin de año del banco central del 3.5%.

Tal como lo indica el IBGE, ocho de los nueve grupos de productos y servicios encuestados subieron en marzo, con destaque para transporte, que aumentó el 3.02% frente al mes anterior, y alimentos y bebidas, que creció el 2.42%.

Por ende, los dos grupos ayudaron con casi las tres cuartas partes de la inflación del mes, señaló el IBGE.

Asimismo, indicó que el resultado en transporte se vio afectado por la suba de 6.7% en los precios de los combustibles. La gasolina, en particular, subió un 6.95 por ciento. A mediados de marzo, la compañía petrolera estatal Petrobras comunicó un transcendental aumento en los precios de los combustibles para afrontar el costo en los mercados globales, luego de que la invasión rusa de Ucrania provocó que los precios de la energía se elevaran.