El Banco Central de Argentina (BCRA) comunicó el jueves una subida de 200 puntos básicos en su tasa de interés de referencia al 49% anual en pesos, con la finalidad de luchar contra la elevada inflación que sufre la tercera economía de América Latina.

La medida, adelantada previamente por el portal Reuters, acompaña la adversa coyuntura global y pretende reducir una inflación que podría cerrar el 2022 por encima del 60% anual.

«El BCRA espera que la inflación de los próximos meses continúe descendiendo gradualmente«, afirmó el banco el jueves en un comunicado, después que el Gobierno comunicara una inflación del 6% en abril.

«Las actuales condiciones financieras internacionales y el comportamiento reciente de los mercados de «commodities» sugieren que puede haberse alcanzado una cierta estabilidad en los precios de las materias primas«, señaló el parte de prensa.

Por ello, la nueva tasa aplicable a las Letras de Liquidez («Leliq») para 28 días equivale a un 61.7%, efectiva anual, ligeramente por arriba del 58% de la inflación de los últimos 12 meses a abril, aunque debajo del 65% que analistas privados pronostican para este año.

«Creemos que la suba de tasas no tendría demasiado efecto sobre la reducción de la inflación y que sí se utiliza para dar espacio a un avance algo más acelerado en el FX (tipo de cambio) ante la necesidad de acumular reservas para cumplir con el objetivo de acumulación trimestral y anual«, dijo el Grupo SBS.

Una tasa real positiva es uno de los puntos convenidos entre Argentina y el Fondo Monetario Internacional (FMI) en el acuerdo que cerraron en marzo para reestructurar una deuda de 44,000 millones de dólares, que el país no podía cancelar debido a una larga crisis económica.

«El BCRA continuará monitoreando la evolución de los precios y evaluará revertir el sesgo de la política monetaria en cuanto se consolide un sendero decreciente de la tasa de inflación«, apuntó el banco.

Luego de subir su rendimiento referencial al 40% en enero (desde el 38% anterior), el banco central había incrementado por última vez la tasa en abril al 47% anual.

El conflicto entre Rusia y Ucrania aumento la inflación global con el alza en las materias primas, obligando a la mayoría de los bancos centrales a aumentar sus tasas, frente a una desaceleración general de la economía internacional.