Argentina lanzó el sábado operativos de control de precios en supermercados luego de que la caída del peso en las últimas semanas generara aumentos en una variedad importante de bienes.

En cuanto a la depreciación del peso, que esta semana alcanzó mínimos históricos casi a diario en el mercado informal, generó dudas en industrias y comercios por temor a que los costos se disparen ante las restricciones impuestas por el banco central para acceder a divisas a través del mercado formal.

«Distintas áreas del Gobierno intensificaron operativos de fiscalización de precios tendientes a desarticular maniobras especulativas en distintos establecimientos como supermercados e hipermercados«, afirmó el sábado la Secretaría de Comercio en un comunicado.

Los operativos también «fueron realizados sobre empresas productoras de bienes de consumo masivo con alto poder de mercado».

La ministra de Economía, Silvina Batakis, que asumió a principios de mes, no ha podido hasta el momento generar confianza en las políticas del Gobierno, pese a haber ratificado el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y su intención de reducir el importante déficit fiscal que tiene el país.

De acuerdo con el último sondeo entre expertos realizado por el banco central, la tasa de inflación alcanzaría el 76% a fin de año. En junio, la inflación fue del 5,3% y los analistas estiman que se acelere en julio.